Como diría un gran ornitológo que conozco, "hay que flipar" cuando se sale al campo. Jeje. Y es que hay jornadas en las que "flipar" es justo y necesario...
Te encuentras una mañana desagradable, con un cielo cubierto y un viento frío que corta la cara y que te hace moquear que da gusto. Pero bueno, te pones a pensar que estás en un sitio privilegiado, en el punto más meridional de la Península Ibérica, a escaso tiro de piedra de una costa marroquí que pareces poder tocar con la punta de los dedos si te estiras un poco... Te das cuenta de que a tu derecha queda el Océano Atlántico y que a tu izquierda tienes la entrada al Mar Mediterráneo, y comienzas a entender el fenómeno de la migración, de una ingente cantidad de bichos que usan este pasillo natural para sus fines vitales y ecológicos...
Empiezas a ver las primeras pardelas baleares que entran al Mediterráneo, o los animados alcatraces que van de aquí para allá, que parecen no tener rumbo fijo y que lo mismo les da entrar que salir... Entonces ves la primera curiosidad del día, un págalo grande, que se acerca a la costa, saliendo del Mediterráneo y ya lo empiezas a flipar...
Entre pardelas baleares, alcatraces, algunos álcidos y banditos de negrones transcurre la mañana, siempre con la presencia permanente de gaviotas patiamarillas y la estridente voz de los charranes patinegros... De repente se oye una voz, que te pide ver la siguiente especie y tú bromeas diciendo que le vas a buscar un págalo parásito... jeje, inocente de ti... Sin embargo, cachondo como es el destino, aparece un curioso amigo, visibile a simple vista, a pocos metros de la costa... Se trata de un págalo parásito, precioso, de menudo tamaño comparado con su primo el grande y de elegante porte comparado con su otro primo el pomarino... Ya te vas alegrando... Pero como el destino es cachondo y mucho mucho, pocos minutos antes de echarle el cierre a la jornada, aparece otro págalo parásito, casi casi tocando las rocas de la costa de la isla, a escasos 150 metros de ti. Se pasea casi casi chuleando delante tuya y pasa entre las patiamarillas que lo corren a gorrazos... Entonces te das cuenta del relativo pequeño tamaño del bicho y de sus peculiaridades: su barriga blanquita, su dorso oscuro y sus inconfundibles manchas blancas de págalo...
Una bonita jornada para "flipar"...
domingo, 14 de diciembre de 2008
Jornada RAM. Isla de Tarifa
Buena mañana en la Isla de Tarifa, aunque no en lo climatológico, donde nos encontramos una mañana fría y con viento de poniente, pero sí en lo ornitológico, por la calidad de los ejemplares que se vieron, gracias en buena parte a las magníficas condiciones de luz y mar. Dos págalos parásitos que pasaron muy cerquita, algunos grupos de álcidos y un par de banditos de negrones, fueron lo más destacado de una bonita mañana de pajareo.
Aquí va el listado de especies:
Aquí va el listado de especies:
Sterna sandvicensis
Larus michaellis
Larus fuscus
Larus melanocephalus
Morus bassanus
Puffinus mauretanicus
Alca torda
Stercorarius skua
Melanitta nigra
Stercorarius parasiticus
jueves, 4 de diciembre de 2008
Y llegó la sorpresa...
Cuando más te desconectas de una cosa para la que seguramente estás predestinado, esa cosa tira de ti, de tu atención, para que vuelvas a ella...
Eso es lo que creo que ha pasado hoy...
Iba de camino a la facultad, pasando por Río Arillo, a las 8:15, cuando entre gaviota y gaviota, veo lo que me parecía una reidora. Sin embargo, a medida que se acerca al coche, veo que su silueta es más estilizada, y cuando ya prácticamente la tuve encima, descubrí su precioso y llamativo pico amarillo, su frente blanca (producto de la estación invernal) y su coronilla negra...
Sin duda este Charrán Bengalí (Sterna bengalensis) ha sido mi alegría del día... Una preciosa aparición para empezar un nuevo día...
El Charrán Bengalí es un Sterna que ocupa prácticamente el mismo nicho ecológico de su familar, el charrán patinegro. En Andalucía, dentro de su rareza, son relativamente frecuentes las ocasiones en las que se dejan ver en paso.
Es sin duda un momento del que disfrutar...
Eso es lo que creo que ha pasado hoy...
Iba de camino a la facultad, pasando por Río Arillo, a las 8:15, cuando entre gaviota y gaviota, veo lo que me parecía una reidora. Sin embargo, a medida que se acerca al coche, veo que su silueta es más estilizada, y cuando ya prácticamente la tuve encima, descubrí su precioso y llamativo pico amarillo, su frente blanca (producto de la estación invernal) y su coronilla negra...
Sin duda este Charrán Bengalí (Sterna bengalensis) ha sido mi alegría del día... Una preciosa aparición para empezar un nuevo día...
El Charrán Bengalí es un Sterna que ocupa prácticamente el mismo nicho ecológico de su familar, el charrán patinegro. En Andalucía, dentro de su rareza, son relativamente frecuentes las ocasiones en las que se dejan ver en paso.
Es sin duda un momento del que disfrutar...
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